La evaluación de la cultura de nuestra organización.

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La evaluación de la cultural organizacional.



La evaluación cultural es un proceso que permite conocer y analizar la cultura organizacional de una empresa, es decir, el conjunto de valores, creencias, normas y prácticas que la caracterizan y la diferencian de otras. 



La evaluación cultural tiene varios beneficios para nuestra organización, tales como:


  • Identificar las fortalezas y debilidades de nuestra cultura actual y cómo influyen en el desempeño, la satisfacción y el compromiso de los colaboradores.

  • Detectar las oportunidades y amenazas del entorno externo y cómo nuestra cultura puede adaptarse o innovar para responder a los cambios y desafíos del mercado.

  • Definir la cultura deseada para nuestra organización, es decir, la visión, misión, valores y objetivos estratégicos que queremos alcanzar y transmitir a nuestros clientes, proveedores y socios.

  • Diseñar e implementar planes de acción para mejorar o transformar nuestra cultura, mediante el desarrollo de competencias, el fomento de buenas prácticas, el reconocimiento de logros, la comunicación efectiva y el liderazgo participativo.



Para realizar una evaluación cultural, existen diversas herramientas que podemos utilizar, dependiendo de las características y necesidades de nuestra organización. 





Algunas de estas herramientas son:


  • Cuestionarios o encuestas: Son instrumentos que permiten recoger información cuantitativa y cualitativa sobre la percepción que tienen los colaboradores sobre la cultura organizacional. Se pueden aplicar a una muestra representativa o a toda la población de la empresa, según el tamaño y la complejidad de la misma.

  • Entrevistas o focus group: Son técnicas que permiten profundizar en la información obtenida mediante cuestionarios o encuestas, explorando las opiniones, actitudes, sentimientos y experiencias de los colaboradores sobre la cultura organizacional. Se pueden realizar de forma individual o grupal, según el nivel jerárquico y funcional de los participantes.

  • Observación directa: Es un método que consiste en observar el comportamiento de los colaboradores en su entorno laboral, registrando los aspectos relevantes para la evaluación cultural. Se puede complementar con el uso de registros fotográficos, de video o de audio, según el tipo de actividad que se observe.

  • Análisis documental: Es una técnica que consiste en revisar los documentos formales e informales que reflejan la cultura organizacional, tales como manuales, políticas, procedimientos, informes, memorias, boletines, etc. Se puede contrastar con la información obtenida mediante las otras herramientas para verificar la coherencia entre lo que se dice y lo que se hace.





La evaluación cultural es un proceso clave para el éxito de nuestra organización, ya que nos permite conocer nuestra identidad, fortalecer nuestra imagen, mejorar nuestro clima laboral y aumentar nuestra competitividad. Por ello, es importante realizarla periódicamente y con rigor metodológico, involucrando a todos los niveles y áreas de la empresa.



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